Durante tantos milenios como llevan existiendo, los humanos no han comprendido en realidad qué es el amor. ¿Cuánto hay de físico y cuánto de mental en todo eso?¿Cuándo es accidente y cuándo destino?¿Por qué se destruyen parejas que son perfectas y funcionan otras que parecen imposibles? No conozco las respuestas mejor que ellos. El amor está simplemente donde está.



Si en mi interior hubiera una nubecita, me gustaría ponerle un nombre.
La llamaría cecilia y la pintaría de colores.

Si fuera capaz de ver, el mundo tal como és,
se me acabaría la vida, sin siquiera sentir que ha sido mía.

Si pudiera pensar en ser feliz esta vez,
dejaría de lado todo y no buscaría porqués.

Si no tubiera este miedo atado en el estómago,
tal vez en lugar de escribir, viviría.

No hay comentarios:

Publicar un comentario